viernes, 29 de junio de 2012

siete días de mayo (las entradas que ofendieron a alguien, facebook decidió retirar y yo abandonar la red)

"El que echa a perder su despedida poco puede esperar del reencuentro"

Milan Kundera, La ignorancia


31 de mayo de 2012
hoy he recordado que en el ensayo clásico "ciudadanía y clase social", T. H. Marshall daba por sentado que la igualdad expresada en los derechos de ciudadanía sería compatible con las desigualdades económicas de clase siempre que éstas no fueran demasiado profundas ni la gente sintiera que la vida que lleva no se corresponde nada con la que se merece...
-ejem, ejem, Marshall, pues aquí hay gente que sobrevive con una pensión de 367 euros al mes, sí, sí, no van mucho al cine la verdad, de hecho salen poco por ahí, se quedan en casa pero no ponen a la vez el ventilador y el horno de la cocina no sea que les salten los plomos de la luz (es que sólo pueden contratar el mínimo, Marshall) en cambio, en cambio Marshall hay otros que ganan 300.000 nardos cada año y tienen cara de no leer mucho, más bien cara de no leer nada, ¿qué no? sí, sí, Marshall, ja, ja, no, no están hechos de bronce, ni los otros de mierda dicho sea de paso, niños fueron todo Marshall, niños fueron todos, eso está claro, pero ¿qué me dices si te cuento que hay jueces que se creen ungidos y magistrados que se sienten como el rey sol, y empresarios para los que todo dinero es poco y que por no pagar impuestos se crean hasta países y hay consejeros de banco que se alejan silbando con 14 kilos en la saca y el paladar muy fino y las gafas caras y no es que hayan arreglado un pedazo roto del mundo, qué va Marshall, al revés, al revés, más bien al revés, pero pasa, pasa Marshall, que si les hablas de política ponen cara de no saber de qué les hablas, si es cierto ¡mira esa nube Marshall! ¿has visto qué verde está ese árbol? Aunque ahora que lo pienso Marshall si se llega a impedir lo de éste,  lo de ese o lo de aquel consejero (como es previsible que pase), sí, si se impide en el caso concreto de los 14 millones, pues… será aún peor Marshall porque parecerá que pasa algo, parecerá que se arregla algo, pero no pasa nada Marshall, la realidad es que nunca sucede nada, ya, sí, la vida claro, la vida, y esa mujer de sesenta años que tenía el pelo roto y cara de vieja contando las moneditas en la caja del supermercado a ver si le llegaba Marshall, a ver si le llegaba, al final ha dejado hasta las pechugas de pollo, así ¡pechuuuuugas fuera! ¿qué que? ¡Mira el sol qué naranja! Ay, pero Marshall cuando te he dicho que ponen cara de no saber de qué se habla cuando se habla de política ¿crees que me refería a la mujer que dejaba la pechuga o al banquero? Ja, ja, Marshall ¡es que eso es lo que tienen en común! Sí, qué raro todo Marshall, oh Marshall, ¿te he hablado de las aves? ¿te confesé cuánto me gustaba pasear por la playa? es gratis ¿cómo se llama ese viento que sopla los primeros días de septiembre? ¿Marshall? ¿dónde estás? Vuelve…
 Maaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaarshaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaall!




Oh, mother, I can feel the soil falling over my head 

las uvas de la ira, john ford, 1940



28 de mayo de 2012
concurso para cinéfilos, creyentes practicantes, practicantes no creyentes, no practicantes no creyentes y gente sensible prácticamente no creyente: ¿qué chantaje es más feo? ¿el que le hace frank booth (dennis hooper) a isabela rossellini en "terciopelo azúl", la obra maestra de lynch (el director de cine, no el profesor de estética de la Universidad de Barcelona) amenazando con matar a su hijo y continuar mandando trozos del marido sino le satisface sus desagradables deseos sexuales o el de rouco varela a la ingenua, bondadosa conciencia de los españoles amenazando con quitar la mezquina aportación (no llega el 2%) de su iglesa a la cristiana labor de caritas si se le trata como un propietario de inmuebles más?

blue velvet, david lynch, 1986

25 de mayo de 2012
acabo de escuchar (tal cual) que el gobierno pide retirar de la asignatura "educación para la ciudadanía" las referencias al modelo abierto de familia pero también las referencias a los prejuicios sexistas y racistas por tener carga ideológica y herir sensibilidades ¿carga ideológica? ¿la sensibilidad de quién? ¿del ku klux klan?
sinceramente, todo esto me parece anterior al contrato social, ese hipotético estado salvaje o de naturaleza, si el anterior gobierno tenía ciertas carencias que hubiera solucionado la lectura aunque fuera overreading de stuart mill, a estos les falta, bueno, yo empezaría... con los pre socráticos y hasta hoy


photo: adivina quien viene esta noche,stanley kramer, 1967




16 de mayo de 2012
Puede que sea una excepción en la historia (lo es) y que sea (sobre todo) una excepción geográfica, pero el estado de bienestar es una de las mejores invenciones del hombre, posiblemente la mejor invención política de la historia, una historia, la del hombre, vulgar, ridícula, y sobre todo cruel
Jurídicamente el nuestro es un estado social de derecho comprometido con ese estado de bienestar y tiene la obligación política irrenunciable de reducir las desigualdades sociales y económicas entre los ciudadanos.
Y no al revés.



  
15 de mayo de 2012
acabo de escuchar a la delegada de gobierno en madrid decir en los desayunos de TVE que "en su opinión" hay un soporte económico en el 15M luego se ha hecho un lio, y ha añadido que es un apoyo económico hay un asesoramiento jurídico, no voluntario, sino de tipo profesional 24 horas y que no le consta pero que en su opinión (sic) todo se organiza desde algunas casas de okupas; la verdad... no escuchaba algo así desde el monólogo de Cliff Gorman en All that Jazz "si yo fuera dios y a veces creo que lo soy, depende de la mierda que me haya fumado..."
¿no llena de una ligera pero incómoda inquietud saberse en manos ya no de buenas o malas personas sino de seres que parecen extraterrestres?
"ladies and gentlemen we are floating in the space" (spiritualized)






14 de mayo de 2012
Ya en proceso de desatarse la Revolución Francesa, se difundió una frase que, supuestamente, había pronunciado María Antonieta. Se contó que, cuando la gente del pueblo, a falta de harina y trigo para preparar pan, fue a Versalles a encararse con ella, ésta habría respondido altaneramente con la frase: «Que coman pasteles» (Qu’ils mangent de la brioche). Este supuesto hecho causó un gran enojo en el pueblo e hizo que la gente fuera aún más dolorosamente consciente de su miserable condición o condición de mierda (condición de merdé)




Fátima Báñez anuncia medidas de apoyo a los emprendedores


13 de mayo de 2012
"Desde el balcón" (el otro lado del 15 M) obra de un único acto (repetido infinitas veces)
por Orlando Osorio


-La culpa de todo esto…, bueno tú ya sabes de quién es la culpa.


-No entiendo… -rio sonora pero falsamente la pequeña María Sorayanipova saltando sobre sí misma para poder ver algo de todo lo que pasaba en la plaza.


- Shoes maker..., do you know what I mean? terció Michaela Walzer, su joven institutriz traída de Princeton.


Joseph Ignatius dio un respingo. Por un segundo su corazón había dejado de latir. El Presidente le tomó del brazo tranquilizándole: no tenía por qué temer, allí nadie iba a hablar en inglés, al menos mientras él fuera Presidente.


-Pero toda esa gente tan rara en la calle… A veces siento lástima por ellos –dijo Ann interrumpiendo por un instante su aspecto de sublime, fraudulenta abstracción- Son tantos y tienen tan poco…


-¡Eso no es asunto nuestro! ¡Tienen lo que se merecen!-se revolvió felina Esperanza Hope que no podía dejar de lamentar su poder para oírlo todo. A veces era un auténtico engorro, otras sin embargo…


-Sin embargo… -meditó Joseph Ignatius como si le hubiera leído el pensamiento- Pensémoslo bien- ¿Qué significa estar in-dig-na-do? -añadió de forma retórica- también sabemos que el Señor da a cada cual lo que se…


-Bueno, bueno -tranquilizó el Presidente, tratando de subir el nivel de la conversación a la vez que prendía fuego a un puro (de ninguna forma le iba a permitir acabar la frase)- al fin y al cabo no somos... calvinistas, miré usted.


-¿Calvinistas? -Esta vez fue aquella bella mujer filipina quien se sobresaltó. Hasta ese momento había logrado sostener en impagable, hierático silencio, allá en la zona solariega de la terracita, una pretenciosa bandeja de bombones. ¿Qué culpa tenía ella de sentirse atraída, tentada, cachonda justamente por "ese" tipo de hombre?


Fue sólo Albert, al otro lado del balcón quien sensible ("demasiado sensible" a decir de Esperanza Hope) se acercó a mimarla. -No querida, no tiene nada que ver con… - le susurró al oído arqueando pedagógicamente sus pobladas cejas en dirección a su cabello, mientras Mr. Boyer Charles carraspeaba incómodo pero extraña, sucia, agradablemente turbado y la tarde desaparecía hiriendo al sesgo de naranja los balcones de los edificios más altos, y las aves zigzagueaban aún más arriba en violentos latigazos contra el cielo y abajo el pueblo gritaba como pidiendo bombones y ella mirando fijamente al suelo presa de un pensamiento loco se sentía arrastrada (otra vez) a miles de kilómetros de todo aquello- Oh, Julio, si no tienen pan que coman bombones ¿verdad? oh, Julio, mi Julio -poetizó ensoñadora- ...son unas baldosas verdaderamente horribles.