miércoles, 2 de mayo de 2012

agelastia



Photo: William Klein "Día del armisticio"
En Cours de Vincennes, celebración, el 11 de noviembre de 1968, del 50º Aniversario del armisticio entre Alemania y Francia

      "Mientras que los que afectan "gran seriedad" la ostentan por todas partes a su alrededor, el pastor Yorik, un personaje de Tristram Shandy, no ve en ello sino engaño, "Un manto que encubre la ignorancia o la sandez". La rebate cuando puede con comentarios "ingeniosos, llenos de humor". Esta "imprudente manera de mostrarse ingenioso" es peligrosa, "por cada diez chascarrillo se gana un centenar de enemigos", hasta tal punto que un día, ya sin ánimos de resistir a la venganza de los agelastos, "arroja la espada" y acaba muriendo "traspasado de dolor". Sí, así es como, mientras cuenta la historia de su Yorik, Laurence Sterne emplea la palabra "agelastos". Es el neologismo que creó Rabelais a partir del griego para designar a los que no saben reír. A Rabelais le horrorizaban los agelastos, por cuya culpa, según sus propias palabras, estuvo a punto "de no escribir ni jota". La historia de Yorik es un guiño fraternal que Sterne hace a través de los siglos a su maestro.

     Hay personas a quienes admiro por su inteligencia, a las que estimo por su honestidad, pero con quienes no me siento a gusto: censuro mis comentarios para no ser mal interpretado, para no parecer cínico, para no herirlas con una palabra demasiado atrevida. Ellas no viven en paz con lo cómico. No se lo reprocho: su agelastia está profundamente anclada en ellas y no lo pueden remediar. Pero yo tampoco puedo remediarlo y, aún sin odiarlas, las evito de lejos. No quiero acabar como el pastor Yorik.

     Todo concepto estético (y la agelastia lo es) plantea una problemática sin fin. A aquellos que antaño lanzaban contra Rabelais anatemas ideológicos (teológicos) los incitaba algo todavía más profundo: el desacuerdo visceral con lo no serio; la indignación contra el escándalo de una risa desplazada:. Si los agelastos tienden a ver en toda broma un sacrilegio es porque, en efecto, toda broma es un sacrilegio. Hay una incompatibilidad irremediable enre lo cómico y lo sagrado, y sólo nos queda preguntarnos dónde empieza y dónde acaba lo sagrado. ¿Estará confinado sólo en el templo o, al extender más allá su dominio, también hace suyos los llamados grandes valores laicos, la maternidad, el amor, el patrotismo, la dignidad humana? Aquellos para quienes la vida es, por entero, sin restricciones, sagrada reaccionan ante cualquier broma con irritación, encubierta o no, porque en toda broma aparece lo cómico, que, en sí, es un ultraje al carácter sagrado de la vida.

     No se entenderá lo cómico sin entender a los agelastos. Su existencia otorga a lo cómico su plena dimensión, lo señala como un desafío, un riesgo, revela su esencia dramática"

Kundera, M., El telón, trad, Beatriz de Moura, Barcelona, Tusquets, 2010, pp. 131-133

Photo: Milan Kundera
Pues, por aquí de regreso a España, siempre a mediodía, siempre con viento, sorteando los escupitajos que medio país lanza al otro medio, una tierra cainita, mezquina y miserable donde las víctimas escupen a las víctimas y todos fuman muy nerviosos negando sin mirar a los ojos que volverían a matarse a mordiscos si pudieran, salvándome la tarde una visita a la red, un comentario naïf sobre alf ross, un tema poco facebook, descubrir en el estante un librito de gombrowicz por leer, una página marcada de kundera, si respondo a la pregunta, ¿dónde? pues en los nuevos lindes de un templo enorme, sobre un terreno antiguamente rústico, hoy, por supuesto, ya recalificado. ¿A qué viene todo esto? Cansado por el viaje y seguramente por ello de un humor peor del que hubiera sido capaz de reconocer, se me ocurre provocar con lo de los escupitajos de medio país contra el otro por la red dibujando la imagen de un experto (en realidad de un técnico) en derecho laboral como otro herido en romería, código sobre el hombro, gesto atroz de semana santa marinera y un señor muy serio me ha llamado "equidistante", "cretino contumaz" y luego "idiota", me consuela que quizás para el pastor Yorik todo esto pudiera haber principado en algo ligeramente cómico, ligeramente gracioso.

Photo: Frank Horvat "La Brasserie Lip en 1969"

4 comentarios:

  1. Mi madre practica la agelastia desde que nació. Nunca me he reído con ella. Me resulta tremendamente aburrida (sé que no leerá esto) y eso me distanció de ella... Cuando lei Tristan Shandy no encontré el parecido que hoy me has desvelado tú.

    ResponderEliminar
  2. hola ximo, sí, sé de lo que hablas, me consta que en ese aspecto nunca se te ha puesto nada fácil.
    Sobre la entrada, como últimamente y a pesar de todo he dispuesto de más tiempo, he podido dedicar parte de él (algunas noches) a entrar en algunos foros, redes sociales, blogs, etc. y me ha producido primero un escalofrío y luego mucho cansancio ver cómo un tanto por ciento muy elevado de comentarios son reacciones atávicas de odio, insultos, exhibiciones con voluntad de superación (del texto que aparentemente se comenta), afirmaciones que son consejos completamente gratuitos, y un largo etcétera en esa línea, la gente no se controla; yo mismo hice la prueba, dije algo así como que en españa había mucho odio y a los dos segundos un tipo me llamó "equidistante " e "idiota" ¿qué te parece? a mí sensacional; creo que la risa de Yorik es la que apunta a esos dogmas de nuestros "amigos", o sea está de puta madre meterse con el rey, con las multinacionales, con personajes como esperanza aguirre, pero prueba con tu mejor sonrisa a decir algo (cualquier broma) de la igualdad de género, de los sindicatos, de la ecología o de los indignados, estate atento y verás como has perdido, como decía Sterne, cien amigos, sobre todo si son de facebook..., bueno, muchas gracias por leer el blog, cuidate, un abrazo

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Jesús, hoy estuve en la feria. Peritación de la ùltima novela de Almudena Grandes. En la ronda de preguntas ha contestado a una refiriéndose a las redes: como todo el mundo quiere ser el primero en contar algo, el mejor, el más impulsivo, y todo con 140 caracteres, pues se han olvidado de la reflexión. Las redes adolecen de esta cualidad... En fin otro mindo nos espera ( soñaré con Huxley esta noche ).

      Eliminar
  3. qué suerte esta tarde poder estar por ahí en la feria; cierta envidia, ¿estaba tu libro?, ya me contarás cómo va;
    sí, está claro que ese espacio no consiente la reflexión, ni los matices, todo eso lo sé, pero aún así sigo creyendo que 140 caracteres deberían dar para dialogar, por cierto, almudena grandes siempre me ha parecido una agelasta, Huxley hace tiempo que llegó, el mundo ya es completamente feliz, abrazo

    ResponderEliminar